La opinión: Deportes Melipilla v/s Everton.

Santiago, 6 de marzo de 2008.

La sensación que deja este encuentro es de impotencia. Difícilmente otra palabra describe mejor lo que fue la actuación melipillana ayer, que no fue de las más malas (de hecho, se rescata el empeño puedo la mayor parte del cotejo, como hemos visto muy poco en el Apertura), pero resultó lamentable en el sentido de ver cómo el elenco melipillano fue incapaz de embocarla una sola vez, de conseguir un miserable empate.

En defensa tuvimos la mala fortuna de que una licencia grande ocasionó el gol para un cuadro que, sin tanto desplante, fue efectivo e "hizo su negocio". Everton no fue nunca un rival avasallador. Pero los melipillanos carecieron de precisión en la parte "caliente" de la cancha, y cuando tuvieron las oportunidades y el ánimo no lo aprovecharon, a diferencia del astuto rival. Mención aparte merecen los cambios. Llegaron tarde, como siempre. Joel López algo mostró en los pocos minutos que se le dieron, pero hubiera sido ideal entrar con él a los 46', ayudando al ímpetu que mostró Melipilla en los primeros 20 minutos de la segunda mitad, y ya no cuando él entró, con un equipo desmotivado. Para colmo el entrenador sacó por él al delantero que había creado más peligro (aunque en su contra, se había farreado muchas oportunidades), Lagunas, dejando a un César Díaz que viene jugando algo desmotivado al parecer. Y si bien Jiménez estaba cansado, quizás junto con Salinas la cosa hubiera sido mejor. Por lo demás, a estas alturas, cuando ya se va perdiendo a mi parecer da lo mismo perder 5-0. Estamos en el fondo, y no perdemos nada con salir con todo si no somos capaces de defender un resultado...

No fue el peor partido de Deportes Melipilla en este Apertura. Pero da pena, casi rabia, el sentir que en este partido se tuvo la opción de siquiera empatar y "nos la farreamos". Por otro lado me preocupan 2 cosas: 1. El nivel de desmotivación del equipo, porque al parecer una cosa se ve en camarines o en los entrenamientos, y otra en la cancha... ¿Qué pasa en las cabezas de nuestros jugadores, y en la intimidad del plantel? ¿Fuentes tiene el control de la situación? 2. La desesperación pasó la cuenta y terminamos con un expulsado: Espinoza, que jugó bien ayer. Por una parte queda la duda de su reemplazo. Por otra, que con ese ánimo, nos va a pasar más veces lo mismo, y con el limitado plantel que tenemos, cada baja es una catástrofe.

Así, las perspectivas ante O'Higgins se ven peor que negras.


Eduardo Peñailillo.