domingo, octubre 22, 2006

Unión San Felipe 2 - Deportes Melipilla 2.

Santiago, 22 de octubre de 2006.

Dejemos de lado los rumores. Me parece increíble cómo hasta la prensa capitalina (bueno, no es tan increíble, se dedican a vender rumores, en gran parte) se hace cargo de ellos. Dejemos de un lado el tema del campeonato. Es cierto, este punto afianza un poco más el hecho de que estamos ascendidos; ya estamos entre los tres primeros, y el campeonato no era la meta, sino llegar a Primera División. Admitiendo todo esto, de todos modos lo de hoy deja un sabor amargo, y da rabia una vez más.

¿Por qué? Porque cuesta comprender cómo, una vez más, nuestro equipo fue incapaz de amarrar el triunfo. Los primeros veinte minutos de Deportes Melipilla, a pesar de los ataques sanfelipeños, nos hacían parecer ver al equipo de la Primera Fase, agresivo, con ganas de vencer. Pero después del gol, se quedaron; no mataron. A eso del minuto 36 anoté "Peligroso esto, Deportes Melipilla se ha confiado y no mató el partido luego del primer gol". Dicho y hecho. Y le pasó la cuenta. Vimos a un plantel cuyos jugadores en general jugaron mejor (al menos en empeño; y algunos recuperando todo su desplante futbolístico), es cierto, pero algunos no dieron la talla. Luis Musrri, como se ha hecho costumbre, tardío y errático con los cambios; damnificado además por una banca que, producto de las lesiones, no es la mejor. Revisando mis crónicas, debe ser como el sexto partido de los últimos 10 que espera a que le metan un gol para efectuar modificaciones. Y esto, dejando de lado los siempre discutibles cambios de Lagunas, que se ha consagrado como el mejor de los hombres de la punta melipillana. (Posteriormente se supo que Lagunas salió producto de las patadas de Chaparro; aclaro el punto)

Pasemos a la crónica del partido mejor.

Una calurosa tarde, con cerca de 30 grados en la siempre calurosa ciudad de San Felipe, recibieron a los entusiastas hinchas que se congregaron para ver un partido que prometía. El San Felipe de Paolorrossi, que venía envalentonado luego del triunfo a domicilio ante el cuadro del almirante, necesitaba un buen resultado para seguir con vida. Por su parte Deportes Melipilla sabía que con una victoria amarraba el ascenso, y eso motivó a su hinchada, que llegó en masa al Municipal sanfelipeño, y que con sus cantos y gritos llenaron de color el lado sur del estadio.

Deportes Melipilla salió a la cancha con: Traverso; Miranda, Valladares, Olguín; Berríos, Johan Fuentes, Cabión, Medina, Pericás; Guzmán y Lagunas; dejando en la banca a: Cabrera, García, Alexis Jiménez, Mauricio Jiménez (su primo) y Víctor González García. Por su parte Unión San Felipe presentó a: Romo, C. Suárez, Chaparro, N. Suárez; Fuenzalida, Díaz, Quiñones, Fortunatti, Reyes; Armijo y Víctor González. En la banca estaban: Valencia, Ruz, José O. Fuentes, Espinoza y Macari.

Juez del cotejo fue Cristian Schiemann.

Comenzó atacando Deportes Melipilla, que parecía entrar inspirado. A los 30 segundos Lagunas casi convertía en el área, y todavía en el minuto había un tiro libre para el Potro producto de que tomaran de la camiseta a Pericás. Luego Lagunas y Berríos intentaban, en unos primeros segundos que prometían. El "Maestro" fue de lo mejor mostrado por el cuadro melipillano, y lo demostró desde los primeros momentos. A los 3' desesperó a su guardían, el violento Chaparro, forzándolo a cometerle foul. A eso de los 5' Unión San Felipe se acercó con algo de peligro, en los pies del empeñoso Víctor González, pero en ese momento Miranda conjuraba con facilidad. Y a los 6', el único arquero que tenía trabajo hasta entonces, Romo, se anticipaba a un centro de Pericás, conjurando el peligro. Poco a poco, sin embargo, se acercaron los aconcagüinos. A los 7' probaba Fortunatti; y dos minutos más tarde el peligro de los balones detenidos, Reyes, obligaba a Traverso a estirarse y desviar su bien ejecutado tiro libre.

Posteriormente se invalidaba un gol sanfelipeño producto de que el meta Traverso había sido empujado antes en el área. De todos modos, Melipilla siguió demostrando ímpetu. A los 11' Berríos desbordó, se sobrepuso a los puntapies, esquibándolos, entró, envió a Pericás, que falló, luego remató Lagunas, ¡y al córner, porque la defensa aconcagüina alcanzó a sacarla! En esos, los mejores momentos melipillanos, el equipo visitante aprovechaba a Berríos y Fuentes para desbordar, consiguiendo crear peligro. San Felipe tenía algunos intentos, pero era más Melipilla, que a los 15' otra vez dejaba pasar un gol, ¡porque Romo contenía a ras de piso un gran remate de Johan Fuentes, luego de buena jugada de Lagunas! Un minuto más tarde, sin embargo, Valladares recibía cartulina amarilla por foulear al desbordador Fortunatti sin contemplaciones. Y al minuto siguiente lo secundaba el local Armijo, que quedaba pintado de amarillo por retener el balón.

Pero en esos, los mejores minutos del Potro, alcanzó a llegar la alegría. Cabión desborda por su derecha. Envía un centro, la pelota da un rebote, pero recibe Lagunas solo... ¡Y Lagunas mataba, fusilaba, sentenciaba a los 18'! ¡Gol de Deportes Melipilla, y explotaban los hinchas del Potro! ¡Era el 1-0, era la alegría, era la esperanza! Esperanza que no duró mucho. Porque Deportes Melipilla se diluyó, desapareció, y Unión San Felipe se apoderó de las acciones de una manera que costaba comprender, considerando lo que había sido el Potro. Johan Fuentes, echado atrás, la sacaba como podía a los 23'. A los 24' Lagunas intentaba, rematando de media distancia, pero Romo lograba contener. Segundos después el aconcagüino González intentaba una vez más, siendo frenado por Miranda. El cuadro sanfelipeño insistía con más empeño que otra cosa, pero al menos insistía, como Armijo a los 27'. A los 29' Melipilla penetraba en el área rival en los pies de Jorge Guzmán, pero perdía el balón el delantero y se "lanzaba a la piscina" en una poco creible actuación.

A los 31' un foul de Cabión le daba otra vez la oportunidad a Reyes con un peligroso tiro libre. ¡Y otra vez Traverso inconmensurable!. A los 34', otra vez, pero esta vez lo reiterado eran los piscinazos de Jorge Guzmán, en otra fallida entrada al área sanfelipeña. Luego de dos córneres sucesivos, Chaparro se lo perdía desviando por milímetros el balón en el segundo de ellos, al minuto 35. Y no tenía descanso el meta Traverso, porque a los 36' enviaba al córner un remate de Reyes, luego de jugada de Fortunatti. San Felipe atacaba cuanto podía ante un Deportes Melipilla desorganizado, que sin embargo intentó salir. A los 39' Lagunas era pillado adelantado cuando se iba en pos del área rival, luego de que un minuto antes no había logrado recibir un muy mal pase de Jorge Guzmán. A los 40' Chaparro fouleaba otra vez más a Pericás, y era una oportunidad para el Meli. Así lo vio Johan Fuentes, que estuvo en una buena jornada con los balones detenidos y lanzó un buenísimo tiro libre. ¡Pero se lo perdieron Lagunas y Guzmán en el área, donde tuvieron oportunidad de meterla dentro! A los 44', en la última jugada de riesgo de la primera parte, Lagunas lanzó a la portería y desvió por muy poco, haciendo pasar susto a los hinchas del Uní-Uní. Luego de dos minutos de descuento, el pito de Schiemann llamó al descanso.

Esperábamos cambios y reacción de Deportes Melipilla en la segunda mitad, para que saliera a matar el partido. No hubo sustituciones, pero los primeros minutos parecían mostrar una reacción melipillana. A los 46' Berríos comenzaba atacando, en lo que parecía un buen presagio. Luego, a los 49', Guzmán tenía una buena ocasión, pero remataba a las manos de Romo. Pero San Felipe despertó pronto. A los 52' cargaba Suárez, pero Traverso se quedaba con el balón. Segundos después nada más ¡el palo salvaba a Melipilla! San Felipe cargaba, y en una de esas cargas, a los 55', caía Víctor González en el área melipillana. Penal cobraba Schiemann, y se preparaba David Reyes para sentenciar. No falló; lanzándola al centro, mientras Traverso se tiraba a un lado. 1-1 que despertaba a los hinchas locales, y hacía llegar a las negras nubes que se veían venir sobre el horizonte de los melipillanos.

Musrri, una vez más, reaccionó sólo luego del tanto rival. No se hizo esperar para la primera sustitución, reemplazando a Jorge Guzmán por Alexis Jiménez, que puso empeño pero no fue demasiado gravitante. A los 58' caía Armijo en el área melipillana, pero nada pasaba; y un minuto más tarde, cuando se iba solo, le cobraban offside a Lagunas. Segundos después recibía amarilla Cabión, que no jugó su mejor partido. A los 60' Jiménez atacaba, pero era otra posición de adelanto en contra de Melipilla, y dos minutos más tarde tenía una mala salida el melipillano. Presagio de lo que ocurriría a los 63'. Ahora cargaba Fuenzalida, lo derribaban en el área, y Schiemann, que no se hace mucho de rogar a la hora de cobrar penales, sentenciaba la pena máxima. Otra vez Reyes, y se venía la noche. Traverso se lanzaba bien, pero ni aún con toda su humanidad estirada llegaba a ese balón. Era el 2-1, los hinchas de San Felipe se abrazaban... Y a los melipillanos, pues que tenían la noche encima.

No se veía por dónde, los ojos de los del Potro parecían nublados, y la sensación de descontrol llegaba también a la barra, donde algún desadaptado le lanzó una botella plástica de bebida al meta Romo (al que no le llegó; la botella se ve a bastantes centímetros del arquero). Por algunos minutos se detuvo el partido, pero Schiemann decidió seguir. Más, en medio de la noche, apareció un rayo de luz. Y Johan Fuentes, que cuando está iluminado responde, demostró que andaba con un foco sobre la cabeza. Minuto 69. Suárez recibe amarilla, y Melipilla recibe un tiro libre que puede aprovechar. Johan Fuentes se prepara para ejecutar. Centra bien al área, y allí un pequeño se eleva para enseñarnos a todos a cabecear. ¡Porque voló por los aires Héctor Pericás y volvió a encontrarse con la red, devolviéndonos las esperanzas! ¡Qué importaba si no era merecido; el grito de gol salía desde más adentro que nunca, cuando menos era esperado! ¡Empataba Melipilla con la testa del mendocino, y era el 2-2!

El partido, como al parecer suelen ser los partidos con los aconcagüinos, se calentó. Confusos incidentes ocurrían en la zona de las bancas, y terminaron con el Preparador Físico de Deportes Melipilla enviado a camarines, mientras Cristian Schiemann no parecía tener control de la situación. A los 74' Lagunas sufría un foul, pero el árbitro dejaba seguir. A los 76' el que intentaba era Víctor González, para San Felipe, pero le pegaba muy mal. Tres minutos más tarde caía Pericás en área rival, pero los defensas sanfelipeños se habían cuidado de darle al balón. Fue en esos momentos que Musrri ejecutó otro cambio, haciendo entrar al Víctor González melipillano por Jorge Lagunas. El delantero reserva no alcanzó el nivel de gravitancia del venido de Copiapó. Los últimos diez minutos comenzaban con una carga del "Maestro" Pericás, y un contragolpe de Fortunatti.

San Felipe jugaba con empeño y velocidad, en busca de un mejor resultado. La defensa melipillana, que no se mostraba tan afiatada como en otras ocasiones, amenazaba zozobrar. A los 82' salía muy mal John Valladares, pero el entuerto era arreglado segundos después. A los 83' sin embargo Pericás, que volvió en gloria y majestad, entraba haciendo lo que quería al área rival, pero no conseguía meterla, y tampoco Víctor González. A los 84' el defensor melipillano en aprietos era Olguín, pero fracasaban los aconcagüinos en sus intentos. Un minuto después había cambio en el equipo del Aconcagua, saliendo el Víctor González local por José Omar Fuentes. Y a los 86' el que fallaba era Felipe Miranda, ¡pero ahí estaba el capitán Cabión para salvar a Melipilla! Melipilla que se conformaba con el empate, porque ya hace mucho que había dejado ir el triunfo.

Cansados estaban los jugadores melipillanos. A los 87' los sanfelipeños desperdiciaban un córner. Luego, a los 90', cuando Melipilla era casi incapaz de hilar dos jugadas seguidas, Cabión fouleaba con dureza a Fuenzalida, pero el tiro libre era controlado por el atento Traverso. Pero la última jugada de riesgo sería melipillana. A 25 metros del área se cobraba tiro libre a los 90'+1' en favor de Melipilla. El "Flaco" Medina se puso frente al balón, y remató. La pelota dio en barrera y salió al córner. Johan Fuentes ejecutó, el balón voló, un larguirucho se elevó... ¡pero Felipe Miranda no logró convertir, en el último momento del partido! Sí, porque luego de eso Cristian Schiemann sentenció el empate.

Un partido trabado, donde ningún equipo fue tan superior al otro. Se dirá que el empate fue justo, de cierto modo. Quizás, pero no es un resultado para quedar contento. No por el tema del campeonato, no porque no se amarró el ascenso hoy. Sino porque nos quedamos con la sensación de que Melipilla pudo hacer mucho más, y no lo hizo. La cuenta de ahorro se acabó. Ahora no basta hacer un tiempo de buen fútbol. El domingo con Lota hay que entregarlo todo, porque esa frasesita cliché de que "es una final" si se cumplirá el fin de semana en el "Roberto Bravo Santibáñez". Al frente, quizás el mejor rival que hemos enfrentado en este campeonato. ¿Qué esperamos de nuestros jugadores? Que sientan que de ellos tiene que salir lo mejor, lo mejor de ellos, de todos ellos. Algunas cosas en este partido pueden servir para la alegría: Volvió en gloria y majestad Pericás, Berríos y Fuentes anduvieron bien, Lagunas creó peligro. Pero ahora es el momento para que no haya fallas. Un punto nos podría bastar, y estaremos con la oreja puesta en los otros pleitos. Pero creemos, creemos aún en que lo que se puede obtener el fin de semana es una victoria. Porque se ha visto, y en algunos pasajes vimos, en algunos jugadores notamos, que Deportes Melipilla está para ganarle incluso a rivales difíciles como este San Felipe que Ariel Paolorrossi ha hecho levantar cabeza. El apoyo dirigencial está. El de la hinchada, ni que decir, ya lo vieron. Por favor: No nos decepcionen.


Desde la capital de Chile, un hincha de Deportes Melipilla,

Eduardo Peñailillo.

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