miércoles, agosto 30, 2006

San Luis de Quillota 0 - Deportes Melipilla 0

Santiago, 30 de agosto de 2006.

El duelo del domingo recién pasado entre el equipo "canario", y el "Potro", era uno de esos partidos que prometían dentro de lo electrizante que se ha presentado este octogonal final de la Primera B. Sin embargo, terminó siendo más condimentado por los errores de un cuerpo arbitral al cual ambas barras hubieran golpeado gustosas, que por el real peligro que hubo en los arcos. Siendo así, el resultado final, donde ninguno de los dos equipos fue capaz de hacerse daño, fue el resultado más justo.

Ante poco más de dos mil personas que se congregaron en el estadio "Lucio Fariña" de la ciudad de Quillota para ver al equipo local enfrentar al actual puntero de la Primera B, los equipos salieron con ganas de ganar. San Luis requería de los puntos imperiosamente para no perder terreno ante sus rivales y volver a aquel "palmo a palmo" que mantuviera con el "Meli" por el primer lugar. Por ello, estrenó una formación netamente ofensiva, de tres delanteros, que prometía arrancar goles al arco de Traverso. Por su parte Deportes Melipilla tenía que acomodarse a las importantes ausencias de Pericás y Lagunas, entre otras; pero confiaba en que su plantel obtendría un buen resultado que permitiera mantener, o quizás ampliar más, la diferencia con sus perseguidores más cercanos. San Luis formó con: Gómez, Salinas, Sepúlveda, Díaz, Montero, P. Pérez, C. Pérez, Celedón, Silva, Galdames y Corominas. El "Potro" salió a la cancha con: Traverso, Olguín, Valladares, Muñoz, Berríos, Medina, Cabión, Manzo, Fuentes, Guzmán y Vrsalovic; quien volvía a la titularidad en reemplazo de quien estaba siendo titular, el suspendido Lagunas.

El primer tiempo, sin embargo, no cumplió con las expectativas. Deportes Melipilla comenzó dominando; y creándose las primeras ocasiones, como un potente remate de Medina al minuto 5 que estuvo cerca de sorprender al golero Gomez. Generaba riesgo además el "Potro" principalmente con el accionar de Johan Fuentes, quien tuvo el domingo una actuación mejor que la que había tenido en partidos anteriores, y reemplazó eficazmente al lesionado Pericás, convirtiéndose en puntal del "Potro". Por su parte los "canarios", a pesar de sus tres delanteros, no conseguían vertir en real peligro ofensivo esta cantidad de hombres en punta. Sólo mediante lanzamientos libres el cuadro quillotano alcanzó a causarle peligro a los visitantes. La primera mitad, en general, fue muy disputada, con diversas acciones de juego violento por parte de los equipos, que no querían ceder terreno al rival. La jugada polémica de la primera mitad llegó en las postrimerías del partido, cuando en el minuto 40' Corominas es bajado por John Valladares en el área melipillana; sin embargo el colegiado Henríquez no cobró nada, para furia de los quillotanos y su hinchada. Después Johan Fuentes tendría la oportunidad perfecta para abrir el marcador, luego del desconcierto de los locales; sin embargo, no lo logró.

En la segunda mitad los equipos salieron con las pilas puestas para tratar de romper el cero. De la mano de Varas (que ingresó al comenzar la segunda mitad) y Corominas el equipo quillotano tuvo algunas intentonas que causaron preocupación al meta Traverso. Luis Musrri, ante los envites quillotanos, decidió reforzar la defensa y reemplazó al sanantonino Juan Manzo por Abrigó en el minuto 51'. Diez minutos más tarde le dio nuevos aires a la ofensiva melipillana, reemplazando a "Maravilla" Guzmán por Marcos González, quien, sin embargo, tampoco logró romper el cero. Si bien el cuadro quillotana lograba tener más el balón, esto no significaba que creara reales ocasiones de gol.

Parecía que el partido terminaría aburridamente, pero los últimos minutos estuvieron llenos de polémica, cortesía del cuerpo arbitral. En el minuto 80 los hombres de San Luis reclamaron un tiro libre que José Henríquez no vio. Enfurecido, el meta Gómez continuó sus airados reclamos contra el juez, que no se había distinguido precisamente por su buen cometido. El árbitro le puso entonces tarjeta roja por sus insultos, en medio de la furia de los hinchas locales. Pero los Meliadictos y la barra melipillana se sumarían pronto a este enojo contra quienes, se supone, deberían hacer justicia en los partidos. Cinco minutos después Johan Fuentes saca un tiro de media distancia, bien habilitado, y logra batir al meta suplente de los quillotanos, Cataldo. El árbitro Henríquez cobra el tanto, sin embargo su secuaz guardalíneas levanta la banderola indicando un offside existente sólo en su imaginación. Reclamos en todo el estadio se oían contra el juez, su familia, y sus secuaces; que desafortunadamente adquirieron un protagonismo que no debieron tener.

No hubo más acciones destacadas en los minutos finales, y "pateando la perra" se retiraron hinchas y jugadores con este empate a cero que no dejó contento a nadie. Un punto que no es malo para el "Potro", pero un arbitraje que es una vergüenza para todos, quillotanos y melipillanos. Un partido entre dos buenos equipos no debería empañarse por colegiados tan malos como este.

Pero ahora sólo queda esperar a un "renacido" San Felipe, que será un rival peligroso para Deportes Melipilla, especialmente teniendo en cuenta las ausencias. La amarilla recibida por Cabión en este partido hará que no esté presente ante los aconcaguinos. Jorge Lagunas debe cumplir su última fecha de suspensión. Héctor Pericás se anunció que tenía para 30 días, aunque se ha rumoreado que podría ir a la banca. Sin embargo, en casa, ante su público, Deportes Melipilla debe saber sobreponerse a las bajas, mostrar su buen juego, e imponerse ante su rival, y así consolidar la ventaja que nos tiene enrielados en el camino que nos hace sonreír: ¡Rumbo a la Primera A!


Desde la capital de Chile, un hincha de Deportes Melipilla,

Eduardo Peñailillo.

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