sábado, septiembre 23, 2006

Deportes Melipilla 2 - Arturo Fernández Vial 2

Santiago, 23 de septiembre de 2006.

Incomprensible. Quizás lo único posible de entender en estos momentos es la rabia, la pena, la desazón que embarga a los hinchas melipillanos, y especialmente a aquellos tres mil que alentaron incondicionalmente a Deportes Melipilla con su asistencia, su apoyo, y que parecía que se iban a llevar un merecido premio. Se fueron decepcionados. Injusto por ellos, por la hinchada melipillana, este empate luego de haber saboreado el dulzor del triunfo parcial.

Ante un buen marco de público (el público final fueron 3.170 personas, que dejaron más de cuatro millones de pesos en recaudación), y nuevamente un sábado por la noche, Deportes Melipilla se preparaba para recibir -en su segundo partido de local "al hilo"- al cuadro de Arturo Fernández Vial, que también fue acompañado por algunos de sus incondicionales. Freddy Mandujano fue el encargado del arbitraje, que en general fue bastante correcto, salvo por algunas faltas dejadas impunes, y un par de discutibles posiciones de adelanto. La entrada de los equipos se vio modificada a la normal a causa del Día Mundial del Juego Limpio (Fair Play), pero el partido comenzó puntualmente a las 20:00.

Deportes Melipilla salió a la cancha con: Cabrera, A. Jiménez, Olguín, Valladares, Manzo, Cabión, Medina, Berríos, Fuentes, Vrsalovic y Lagunas.

Por su parte, Arturo Fernández Vial formó con: Valladares, Torres, Martínez, Mena, Díaz, J. Pérez, Burgos, Candia, Zambrano, Maciel y Carrasco.

Al minuto, luego de un error de Olguín, que no hizo su mejor partido, Cabrera se vio exigido y debió mandar el balón al córner. Los primeros 3 o cuatro minutos fueron del Vial, pero pronto Deportes Melipilla se fue acomodando. Vrsalovic desperdició una gran ocasión a los 4'; y a los 6' luego de que bajaran a Berríos, Melipilla desperdició un tiro libre. Por su parte el cuadro penquista pronto demostró que apostaría a la velocidad y a los contragolpes, especialmente en los pies del veloz Maciel. Sin embargo poco a poco el cuadro melipillano se fue adueñando de la iniciativa. A los 10', el público y los jugadores del "Meli" reclamaban porque uno de los guardalíneas le cobraba offside al siempre activo Jorge Lagunas.

Dos minutos más tarde el adelantado era el vialino Maciel, cuando amenazaba con zozobrar, y no por vez primera, la defensa melipillana. El equipo local, sin embargo, le ponía mucho empeño en atacar, en crear juego ante todo; especialmente de la mano de Medina y Berríos, aunque fallaba a la hora de crear peligro cercano al arco. Ningún equipo, sin embargo, tenía absoluto dominio sobre el otro, y el cuadro visitante hacía pasar susto de tanto en tanto a los entusiastas hinchas locales. A los 18' el vialino Burgos se ganaba amarilla, por un fuerte foul. Dos minutos después Deportes Melipilla intentaba una vez más, probando Johan Fuentes de media distancia al guardameta Ronald Valladares. Melipilla acechaba, cada vez con más riesgo, hasta que llegó la apertura de la cuenta. Ya veremos las imágenes por la noche de mañana, o en la semana, pero por la descripción del gol, amenaza con ser memorable. Cabión envía un balonazo. Lagunas lo recibe, y el delantero melipillano se tiene fe, entra a matar, la clava abajo, y mata, mata... ¡Gooool de Deportes Melipilla! ¡Jorge Lagunas nos daba la ilusión del triunfo, y hacía estallar el "Roberto Bravo Santibáñez con su tanto!

Un minuto después José Luis Cabión recibía amarilla por parte del árbitro Mandujano. Y luego, a los 26', el meta melipillano se enfrentaba algo dudosamente a Maciel, pero aprovechaba que el vialino fallaba. Sin embargo, las dudas las disipaba a los 27' el "Toro" Vrsalovic, reencontrándose con la red. La defensa vialina reclamaba posición de adelanto, pero nada había; Vrsalovic había entrado bien y la clavaba en el fondo de la red de mejor forma aún, con clase. ¡Éxtasis en el Roberto Bravo por el 2-0 que estaba obteniendo Deportes Melipilla! Posteriormente, Melipilla se quedaría, no clavaría el dardo final, y el cuadro vialino no bajaría los brazos, aunque con pocas ocasiones de real peligro. A los 31' Lagunas intentaba una vez más, segundos después de que el juez del partido le salvara la vida a Cabión. A los 33' intentaban Burgos con Zambrano para el Vial, y luego Maciel. Y segundos más tarde el cuadro penquista desperdiciaría una oportunidad de oro. ¡Sólo se quedó Carrasco para recibir un balón de un córner, y no la pudo meter en el pórtico de Cabrera!

A los 36' Burgos intentaba una vez más. Deportes Melipilla declinaba por entonces, como si se conformara con la ventaja. A los 37' Franco Cabrera tuvo que mostrar calidad para conjurar el peligro que llevaba Maciel. Y un minuto más tarde su colega del Vial pasaba sustos producto de un error propio, que dejó "servido" a Vrsalovic, quien no logró meterla dentro. A los 40', marcando cierto "despertar" entre los melipillanos, remataba fuerte José Luis Cabión, y Ronald Valladares apenas lograba enviar al córner. Y a los 42' el mismo Valladares lograba sacar a duras penas un balón cabeceado hacia atrás por uno de sus propios compañeros luego de un córner. Sin embargo, se irían al descanso con un invariable resultado. 2-0 para Deportes Melipilla, que parecía gozar de un partido ahora más calmo, y que ganaría con comodidad.

Qué equivocados estábamos. Arturo Fernández Vial salió con voluntad de remontar el resultado y sacar adelante el partido. Ortega, y Darwin Pérez, entraron para darle nuevos aires al cuadro penquista. Y en la primera ocasión, el azar y el empeño vialinos le daban un golpe bajo a Deportes Melipilla. Tiro libre para los visitantes en las cercanías del área, el balón rebota en un jugador vialino, Cabrera queda descolocado, y Mena convierte sin apelación el 2-1 a los 46'.

El partido en gran parte de la segunda mitad fue de ida y vuelta, con ocasiones para ambos, pero luego del gol Deportes Melipilla pareció reaccionar por momentos. Segundos más tarde Lagunas hacía renovar el aliento de los parciales melipillanos, porque en sus pies estuvo el tercero. Y a los 48' Alexis Jiménez enviaba apenas desviado. Un minuto más tarde Mena buscaba repetir luego de un tiro libre vialino, pero la retaguardia melipillana lograba contenerle. A los 51' lo tuvo el veterano Zambrano. Un minuto más tarde Zambrano se ganaba amarilla por foul a Cabión. Recién a los 54' Musrri decidió hacer el primer cambio, cuando el trámite del partido ya declinaba, sacando a Lagunas y haciendo entrar a Marcos Gonzáles. Dos minutos más tarde el Vial agotaba sus cambios, reemplazando su DT al histórico Zambrano por Henríquez.

Comenzarían quizás los mejores pasajes de Deportes Melipilla en el segundo tiempo, con varios lanzamientos de esquina y ocasiones en las cercanías del área, que no fueron aprovechados. A los 62' el chico Berríos se sacaba a dos defensas vialinos y la mandaba apenas sobre el travesaño. A los 64', otra ocasión desperdiciada para el Meli. Dos minutos más tarde Cabrera se lucía echando fuera un balón con los pies al salir a atajar un contragolpe vialino. A los 67' se enojaba Vrsalovic por un foul contra él que quedaba sin sanción, y segundos más tarde se retiraba el chico Berríos, entre los aplausos del público, siendo reemplazado por el otro "chico": Romero, que reaparecía luego de bastantes semanas de ausencia, y tuvo un cometido aceptable. A los 69', una vez más Cabrera se quedaba con el balón. Y luego Melipilla desperdiciaba otro córner m´s.

A los 72', la debacle. Un remate vialino da en la esquina del pórtico y se devuelve a la cancha. Cabrera se confunde, la defensa melipillana también, y el único que lo tiene todo claro es Henríquez, que se zambulle, y de "palomita", convierte un 2-2 que hacía felices a los aurinegros, e instalaba rostros de perplejidad en los melipillanos. Deportes Melipilla no había matado en su momento, y ahora le clavaban los dardos por los goles perdidos. Y tampoco supo reaccionar el equipo melipillano; buscar, como otras veces, con todo el resultado. No lo hizo.

Se envalentonó Fernández Vial, y sin embargo, Melipilla tuvo una gran ocasión a los 76', en los pies de un tiro libre de Alexis Jiménez. ¡Y el balón se estrelló en el palo! Dos minutos más tarde sin embargo eran los vialinos los que se agarraban los pelos. ¡El inconmensurable John Valladares se jugaba el pellejo e impedía que Maciel marcara! Grande Valladares, que estuvo creando juego gran parte del partido, y como tantas veces tuvo intervenciones claves. A los 80' Johan Fuentes desperdiciaba una oportunidad, pegándole horrible. Tres minutos más tarde un cansadísimo Medina y el chico Romero encabezaban otro fallido intento melipillano. Al mismo Romero le daban sin balón a los 86', pero Mandujano no veía nada. Musrri recién decidió sacar a Johan Fuentes y hacer ingresar a "Maravilla" Guzmán, el que en 4 minutos obviamente no dio vuelta una realidad que no había por dónde dar vuelta. El suplicio se hizo interminable, y el público, fiel como pocos, se quedó hasta el pitazo final. Pero no ocurrió el milagro. El partido terminó en un empate, en un empate ineplicable, en un empate que es una verdadera farra por parte de Deportes Melipilla.

En otros malos resultados he señalado que no era la hora de las críticas, que había que alentar al equipo y a los jugadores. Pero parece que no responden. ¡Es injusto, injusto, que desperdicien así partidos! Injusto para una hinchada que los alienta, que hoy les dio ánimo de principio a fin, les brindó una entrada espectacular, los acompañó incluso considerando que probablemente después de las Fiestas Patrias pocos ahorros tenían para recurrir para pagar una entrada, y fueron igual. No, señor Musrri, no diga que la hinchada no lo apoya (ver anécdotas del partido), porque la gente melipillana ha respondido a la ilusión que este equipo nos ha creado. Pero ahora esa ilusión se diluye. Aún luego del magro resultado ante Curicó Unido el apoyo popular no declinó. ¿Y cómo se le responde a este público? Empatando un partido ganado; no teniendo voluntad de matar el partido... Fernández Vial podrá no haber jugado mejor, pero tuvo algo que no sé si Deportes Melipilla tuvo: Convicción, voluntad hasta el final. Y lo lograron. Más por los errores melipillanos que por su propio mérito, pero lo hicieron.

¿Qué pasa? ¿Líos de camarín? ¿Falta de ánimo? ¿Problemas con la dirigencia? Lo último no lo creo: La dirigencia melipillana ha demostrado ser competente y responsable, comprometida por el club. Musrri señaló que no es la dirigencia la que les exige subir a Primera, sino ellos mismos, cuerpo técnico y plantel. ¡Entonces con más razón deberían tener presente que ese objetivo se logra ganando! El DT melipillano dijo que futbolísticamente ningún equipo nos supera. Quizás tenga razón, pero parte de jugar al fútbol es saber ganar; y parece que a Deportes Melipilla se le olvidó esa lección. Hoy, después del 2-0, Melipilla se olvidó de matar. El 2-1 fue una luz de alerta, y aún así se olvidó de buscar el resultado como la hacía antes, de entregarse como lo hizo no hace mucho tiempo. Nunca reaccionó por completo el equipo melipillano, no nos dio la impresión de dejar el corazón en la cancha por lograr el resultado, aunque el "flaco" Medina haya terminado casi rendido jugando los últimos minutos de tanto que intentó crear juego, aunque a veces lanzara puros "ladrillazos". No bastó con un Valladares presto en defensa, con un Romero que respondió a que lo dejaran entrar... Y no va a bastar. Si este equipo no se pone por completo los pantalones, y recuerda lo que tiene que hacer, los desequilibrios individuales no van a bastar. Otros equipos, quizás con menos fútbol, pero con más corazón, orden, e inteligencia, se han dado cuenta de lo que tienen que hacer, y lo hacen. Los resultados están a la vista.

Una noche para patear piedras; sinceramente. No lo puedo comprender, y estoy seguro que buena parte de los hinchas melipillanos tampoco. Ojalá sólo sea una mala racha, que en Noviembre nos ríamos de este mal momento y de las palabras de rabia. Porque la otra alternativa es que al final del año tengamos que decir lo que dijo el ex DT de Curicó Unido sobre su equipo: Que no teníamos categoría para subir a Primera División.

Desde la capital de Chile, un hincha de Deportes Melipilla,

Eduardo Peñailillo.

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