miércoles, noviembre 01, 2006

Deportes Melipilla 2 - Lota Schwager 0

Santiago, 1 de noviembre de 2006.


















La última crónica, la del partido ante San Felipe, la terminaba con un "por favor, no nos decepcionen". Y no nos decepcionaron. Incluso el equipo melipillano dio una clase de fútbol durante la segunda mitad. En algún momento de rabia después de un mal partido señalé que, de seguir así, tendríamos que decir que no teníamos categoría para subir a Primera. En este partido, y cuando fue necesario, Deportes Melipilla mostró toda la clase que le vimos gran parte del año. Y si durante el primer tiempo en la transmisión radial de la Ignacio Serrano se dijo que a Melipilla le faltaba sangre, se equivocaron. Fue el único equipo que la tuvo en cancha. Porque Lota Schwager, si bien salió tranquilo a afrontar el pleito ante un Deportes Melipilla nervioso e intranquilo, al final no despertó.

Maciza victoria del cuadro melipillano, que le dio además la alegría de volver a la División de Honor, fue la que vimos el domingo en el Municipal melipillano, que registró lejos la mejor asistencia del año, con 5.871 espectadores que repletaron los asientos, e incluso tuvieron que quedarse de pie. Dejaron más de 11 millones de pesos en recaudación, lo que es otra buena noticia para nuestro club. Los previsores llegaron temprano: A eso de las 16:00 calculábamos un lleno de cerca del 70% del estadio. Ambas hinchadas llegaron encendidas, dispuestas a ver ganar a sus equipos y alentarlos para ello. Los Meliadictos se hicieron presentes con numerosos extintores, rollos de papel, globos, la camiseta gigante y la bandera gigante. La hinchada lotina no fue menos.

Enrique Osses, junto a Cristián Julio y Manuel Rodríguez, fueron los colegiados que, enviados desde la Primera A, estaban convocados a arbitrar este partido. Deportes Melipilla ingresó con: C. Traverso; C. Olguín, F. Miranda, J. García; L. Medina, J. Fuentes, H. Berríos, C. Abrigó; H. Pericás, J. Lagunas y V. González. Lota Schwager por su parte salió a la cancha con: C. Limenza; G. Moreno, C. Oviedo, A. Rivera, O. González; A. López, C. Vera, F. Castillo, C. Mora; L. Monroy y M. Sierra.

A las 17:01 Osses dio el pitido inicial, luego de la gran salida de ambos equipos a la cancha. El cuadro melipillano comenzó con entusiasmo y con ganas de atacar, sin embargo pronto se le notaron los nervios, que le pesaron durante toda la primera mitad. Por su parte el cuadro lotino comenzaba con algo más de tranquilidad, tratando de retener el balón. Al minuto 3 Castillo disparaba sin éxito, aprovechando uno de los varios errores de Abrigó. Un minuto después Traverso tenía que contener otro remate, y el medio melipillano no respondía. No era el único que fallaba con los nervios: el horrible saque de meta de Olguín a los 5' puso en peligro la valla de Traverso, pero afortunadamente no ocurrió nada. A eso de los 8' Lagunas tuvo un primer intento, pero sin éxito. El hombre venido de Copiapó atacaba muy solo, y esa situación se repitió durante la primera mitad.

A los 9' Lota Schwager realizó el recontra anunciado cambio del juvenil Sierra por Patricio Morales, goleador del campeonato. Un minuto más tarde uno de los guardalíneas señalaba un offside que anulaba el gol que de globito convertía Héctor Berríos. Los cobros discutibles seguirían un minuto más tarde, cuando al lotino Vera no le cobraban una mano, pero sí un foul cometido contra él. La defensa melipillana seguía feble ante los avances lotinos, que de tanto en tanto se dejaban caer. A los 16' Víctor González, de errático comentido, le pegó al balón como vino, pero su tiro se fue alto. Un minuto más tarde, ¡se lo perdía sólo el lotino Vera! Morales había entrado solo, desequilibrando, centró bien, pero Vera increíblemente no convirtió. El mismo Vera un minuto más tarde se tiraba impunemente "a la piscina", si bien el juez no le creía. Osses, momentos después, se trenzaba en una discusión con Musrri, que de puro exasperado casi había ingresado a la cancha.

A los 20' se cobraba una dudosa mano que redundaba en un peligroso tiro libre para Lota Schwager. Sin embargo, los lotinos no aprovecharon la oportunidad y Abrigó se reivindicaba en algo despejando. Un minuto más tarde se producía la primera llegada de peligro de Melipilla. Y no podía ser sino con Jorge Lagunas, que se sacó a los defensas, pasó a Limenza que salió a sacar pajaritos, estaba solo frente al arco, ¡pero no contaba con González, que la envió al córner! Susto para Lota. Seguía llegando Melipilla segundos después mediante un tiro de media distancia de Johan Fuentes, que se iba apenas por arriba. Posteriormente, luego de que la delantera melipillana hiciera una jugada colectiva por vez primera, la pelota terminaba en una serie de tres lanzamientos de esquina seguidos, que el Meli no supo aprovechar. Y a los 25', ¡otra llegada de Lagunas! Más espectacular aún, el "expreso del Norte" se sacó a Limenza con un globito, pero desvió a la hora de definir. Las oportunidades perdidas no hacían más que ahondar los nervios en las gradas.

El cuadro lotino, sin embargo, no se desesperaba, e intentaba con cierto ímpetu, pero sin crear demasiado riesgo. Después de un córner a los 32', el lotino López, que se notaba algo resentido, cayó tendido en el centro de la cancha. Volvió luego, sin embargo, dejando la impresión de que había sido "teatro". Berríos descolgaba por su carril a los 36', pero con un muy mal centro anulaba toda su buena acción. El cuadro de la lamparita también dejaba pasar buenas ocasiones, como a los 37', cuando Morales "le dio con el diario", y se perdió por muy poco un gol luego de una jugada donde la retaguardia melipillana había naufragado por completo. A las llegadas lotinas Deportes Melipilla respondía con algunos ataques desordenados, que hacían notar la inconexión entre el solitario Lagunas y un Víctor González que no respondía a la oportunidad de ser titular. Esto quedaba aún más claro cuando a los 39' Lagunas elevaba un genial centro que dejaba "pagando" a Limenza, mas no había algún melipillano en el área como para haber aprovechado. López, a quien ya mencionamos, fue finalmente reemplazado a los 41' por su compañero Mardones, cuando ya no resistía más en la cancha, pero se retiró lentamente. El cuadro lotino practicaba una enervante parsimonía y parecía decidido a aguardar el segundo tiempo. Melipilla tuvo una desaprovechada oportunidad mediante un tiro libre a los 45'+1', luego de que Rivera le diera un golpe sin compasión a Lagunas. Segundos antes Osses le había plantado una inexplicable amarilla a Abrigó, que había sufrido foul. Así llegaba a su fin la primera mitad.

A pesar de que Deportes Melipilla había creado peligro, los nervios le estaban jugando malas pasadas, y no estaba presentando un buen juego. Eso hacía temer a muchos que pudiera darse lo de tantos partidos: un cuadro melipillano siendo sorprendido por su rival en los primeros minutos de la segunda mitad. Por su parte al frente había un rival que, si bien demostradamente vulnerable, se veía más ordenado y tranquilo. Desde las 18:04 las dudas sobre la segunda mitad comenzaron a resolverse. Al minuto la defensa melipillana nos hacía pasar un susto más ante una llegada de Moreno, que Olguín despejó como pudo. A los 48' llegaba Melipilla, provocándose un córner.

Llegaba así la jugada más inexplicable del último tiempo, una que nunca entenderemos cómo ocurrió exactamente. Johan Fuentes la eleva y el impetuoso viento en algo debe haber ayudado. Al parecer la impulsa García hacia el arco. En el área, un lotino caído hacía pensar en un autogol. Limenza estaba en el suelo, y desde dentro del arco un desesperado defensa minero la saca fuera. Pero no engaña al árbitro, ni a nadie en el estadio. ¿¡Qué importaba cómo hubiera sucedido!? ¡La pelota había entrado, y, aunque extraño, era gol de Deportes Melipilla! ¡Goooool, un gol que hacía estallar el "Roberto Bravo Santibáñez" de emoción, y animaba a los jugadores, que hacían gestos al público, que no demoró en levantarse a gritar y alentar! Porque esta vez el gol tempranero era para el "Potro", y sus efectos no tardaron en notarse.

Musrri, demostrando que hay costumbres que no se abandonan, una vez más esperó al primer tanto para realizar la primera sustitución, sacando al errático Víctor González por Jorge Guzmán. El delantero no intentó responder a su apodo de "Maravilla", y asumió una posición más retrasada, permitiendo a Pericás adelantarse. No deslumbró Guzmán, pero fue mucho más útil esta vez que en partidos anteriores, donde había sido muy cuestionado. A los 51' Deportes Melipilla desaprovechaba un peligroso tiro libre y luego Lota intentaba la contra, fracasando la visita gracias a la intervención del atento Berríos. El cuadro minero comenzó a intranquilizarse, pero los nervios no le bastaron para reaccionar. A los 53' intentaba Lagunas luego de un buen centro de Guzmán, pero el balón se iba alto. Y a los 55' el que recibía habilitación de Guzmán era Berríos, pero también fracasaba.

El gol había dado a Deportes Melipilla una inyección de energía que se traducía en una mejora general del nivel. La defensa melipillana, que había estado errática, se solidificó y contuvo los desorganizado avances mineros. Por su parte los hombres de ataque no cesaron en sus intentos de ampliar el marcador. Como Berríos, que nos hizo gritar gol con su remate, pero desafortunadamente había rebotado en la parte exterior de la malla. El cuadro lotino no respondió a la desventaja con argumentos y cayó en la violencia. A los 58' bajaban groseramente a Pericás, en una acción que quedó impune. La que no quedó sin castigo fue a los 60', cuando Vera le dio un criminal planchazo a Abrigó, sin ninguna justificación, y Osses lo mandó a los camarines. Tal acción dejó a la visita con 10, y además se ganó los gritos de "huevón, huevón" del respetable. Abrigó no pudo seguir luego del golpe y fue reemplazado por Juan Manzo, retirándose el lesionado entre aplausos de apoyo. El partido se estaba calentando y a los 63' Pericás, que disputaba un balón con un lotino en el costado oriente, casi se trenza a golpes con él, ganándose una amarilla. Luego se la ganaba Jorge Guzmán, que nos hacía temer que se ganaría una expulsión al darle duro al lotino González.

Afortunadamente Deportes Melipilla volvió a su cauce. A los 64' Lagunas intentaba, pero fracasaba, mientras sus compañeros le reclamaban porque no había centrado. A los 68' Lota intentó cambiar la situación reemplazando a Moreno por Marcos Plaza. No sirvió la sustitución. El cuadro lotino no era el mismo que puso en jaque al Potro en la primera fase, y esta vez atacaban sin crear real peligro y sin poder imponerse. En medio de la impotencia lotina fue que llegó el segundo tanto. Héctor Pericás se reencontró con su público, y haciéndole honor al mote de "Maestro": Recibió un buen balón de Guzmán, se saca a un par de defensas, se coloca en posición con calma y seguridad, remata, y fusila a Limenza. ¡Gol de Deportes Melipilla a los 70' y la hinchada del Caballito no cabía en sí de alegría! ¡Era el 2-0, sí, 2-0 para el equipo melipillano! Y los lotinos, no haciéndole honor al juego mantenido durante el año, respondían con golpes, llegándose a la vergonzoza situación de que el minuto 72 vio a dos jugadores melipillanos caídos por acciones violentas. Osses respondió amonestando al lotino Castillo.

Deportes Melipilla, en cambio, quería más. Y a los 75' Limenza debía desplegar todas sus dotes para contenerle el tercer gol al chico Berríos. Luego intentaba Manzo, sin éxito. Cargaba luego Lota Schwager, pero sus intentos eran contenidos por unos defensas que se habían agrandado, especialmente García y Miranda, este último responsable de enviar el balón a la calle Silva Chávez con su potente remate que cortaba un avance de la visita. A pesar de que hasta Lagunas bajara a recuperar balones, el cuadro local no cesaba en sus intentos, reflejado esto en el levemente desviado rechazo del veterano Luis Medina a los 78'. Dos minutos más tarde Plaza se ganaba otra cartulina amarilla por reclamar, en medio de los pocos y vanos esfuerzos del cuadro minero. Deportes Melipilla manejaba el pleito: sus defensas estaban más sólidos que el Muro de Berlín, los avances lotinos no penetraban, y Pericás tenía loca a la retaguardia visitante.

Musrri aprovechó los últimos minutos para hacer entrar a Rodrigo Romero, quien reemplazó a un Pericás que se retiró acompañado de una ovación de pie. Los lotinos, sin poder crear juego, apostaban en vano al "ollazo". Mientras la "familia Miranda" hacía ingreso al estadio se encontraban caídos dos hombres: el melipillano Guzmán y el lotino González. Pero sólo había sido una acción de fútbol fuerte. A los 87' se cobraba un dudoso offside al "chico" Romero, que se había incorporado con entusiasmo a las labores ofensivas. Un minuto más tarde Plaza intentaba conseguir el gol del honor, pero remataba desviado. Los minutos siguieron transcurriendo, sentenciando a cada segundo lo que sólo esperábamos que el pitido final ratificara para comenzar a celebrar. Y luego de un par de minutos de descuento, llegó el ansiado pito.

Para decir ¡Y ya lo ven, y ya lo ven, en Primera otra vez! Deportes Melipilla había obtenido el ascenso directo mediante una victoria contundente, que nos había permitido, especialmente en la segunda mitad, ver a nuestros muchachos como siempre quisiéramos verlos: unos titanes en la cancha dando clase de fútbol. Un 2-0 que era mucho más que una simple victoria.

Luego del objetivo logrado, miramos a Curicó Unido. La "bestia negra" de Deportes Melipilla este año ha ganado dos de los tres encuentros que hemos tenido, y empatado el otro. Sin embargo, si nuestro plantel sale con esa hambre y con esa clase que demostró el domingo, no sería de extrañar una victoria, victoria que nos llevaría a ser campeones de la Primera B, de no mediar que Ñublense ganara y descontara los 5 goles de diferencia que le llevamos.

¡Al galope Caballito! ¡"En" Primera División!


Desde la capital de Chile, un hincha de Deportes Melipilla,

Eduardo Peñailillo.

1 comentario:

alvaro dijo...

Hola

Felicidades por el Ascenso, tanto a ti Eduardo, como todos aquellos que siguen al club.
De seguro estaré presente en algún partido de Melipilla el 2007... La mejor de las suertes en lo que viene...

Saludos